L'EVOLUZIONE
Este años cumplo veintisiete años. “Bueno, no son muchos”, diréis vosotros.
Es verdad, si fuera un ser humano iniciaría recién a mover los primeros pasos en el mundo de los adultos; si fuera un árbol tendría aún numerosas anillas por añadir a mi tronco y si fuera un planeta mi edad no representaría nada, una migaja infinitesimal de todo el tiempo a mi disposición..
En realidad no soy nada de esto: me llamo Evolut y soy una empresa que vive en Castegnato.
Y ahora realmente decidme si esto no cambia la perspectiva y coloca mis veintisiete años bajo otro aspecto: diría que soy una meta que no estoy al alcance de todos.
¡Cuántas cosas he aprendido y cómo he crecido!
En el sector del que me ocupo, el de la automatización industrial, la experiencia adquirida sistema tras sistema tiene un valor incalculable, acompañada por las ganas de diseñar siempre cosas nuevas y desarrollar software capaces de ayudar a los humanos en vuestro trabajo.
Durante mis veintisiete años he podido tocar con la mano la evolución de la tecnología, caminando a su lado: me recuerdo que, cuando yo era pequeña, los robot representaban una novedad, aunque para algunos mirada con difidencia y escepticismo; ahora en cambio forman parte de cualquier proceso de producción.
Deteneros un momento y guardaros alrededor, pensando en el nivel de desarrollo tecnológico alcanzado: ¡es increíble! Máquinas que se comunican entre ellas, robot y humanos que trabajan junto como buenos compañeros de equipo... y creo que las sorpresas aún no han acabado.
Para mi ha sido electrizante encontrarme en el ojo del huracán y participar en primera persona en la investigación de la innovación y en este deseo de descubrimiento que ahora encuentra una nueva savia vital en la Industria 4.0: nos encontramos de frente a una enésima revolución Industrial, y es inútil decir que estoy orgullosa de formar parte.
Lo sé, el camino por recorrer aún es largo.. ¡pero el futuro nunca ha estado tan cerca!